Toda luz que nos llega del Universo, nos llega con demora.
La luz del Sol viaja unos 8 minutos antes de llegar a la Tierra, así que lo que vemos es el Sol como era hace 8 minutos. Pero si miramos más lejos, la galaxia de Andrómeda por ejemplo, al contemplarla estamos mirando dos millones de años en el pasado. Incluso las estrellas de nuestra propia galaxia son tan remotas y lejanas que su luz ha tardado millones, o más, en llegar al alcance de nuestra vista. 
VOYAGERS hace alusión al viaje de esas luces a la Tierra. Luces tan antiguas como el amanecer de los tiempos. Soles primitivos que murieron en el pasado remoto del Universo y que en su estallido expulsaron los elementos que formaron nuestro mundo. Estrellas que ya no existen, pero su luz sigue viajando por el Cosmos. 
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